20 de mayo
Kalundborg, Dinamarca
¡Nace Sigrid Undset!
Mujer escritora, humanista, entre los primeros noruegos a prevenir contra los nazis.
Sigrid era la mayor de tres hermanas, su madre, Charlotte Gyth de Kalundborg, pertenecía a una familia noble burguesa. Charlotte, quien se encargaría de su educación, influyó en su pasión a las letras: «Mi madre censuraba duramente los libros (…). Todo lo que era sentimentalismo estúpido o vulgar, todo eso lo sacó de mis manos y lo despreciaba. Así que yo tenía que conformarme con Homero o con las comedias de Molière, o tal vez con los poetas italianos del Renacimiento». A Sigrid se le permitía escuchar conversaciones sobre arqueología e historia haciendo que creciera su amor hacia el medioevo, que comenzó en su infancia, y se mezcló con el gusto por contemplar el paisaje nórdico a los que, de forma natural, Sigrid acudía.
A la muerte de su padre, Sigrid ocupó en su hogar el rol de protectora, encargada de sostener a los miembros de su familia en todos los ámbitos.Durante diez años ganó su propio sustento y su primera novela La señora Marta Ulia vio la luz en 1907. Su formidable venta permitiría que abandonara su antiguo trabajo y consiguiera una beca que la llevaría a Roma para formarse en lo que era su verdadero sueño. Estuvo casada con un hombre con hijos que la violentó hasta que, tras varios años de matrimonio, embarazada de su tercer hijo, decidió dejarla; a pesar de todo, prometió hacerse cargo de sus hijos y de los hijos del anterior matrimonio de su exmarido.
En la II Guerra Mundial debió presenciar el fusilamiento de su hijo mayor y el incendio de su hogar. Fue perseguida por el partido fascista al posicionarse radicalmente en contra de ellos, posicionamiento ideológico que acabaría obligándola a huir al ser perseguida por el partido. Al terminar la guerra, volvió a su país.
Algunos fragmentos:
“Nadie ni nada puede hacernos daño, niña, excepto lo que tememos y amamos.”
“Es bueno cuando no te atreves a hacer algo si no crees que es correcto. Pero no es bueno cuando piensas que algo no está bien porque no te atreves a hacerlo”.
“Y veo que todavía no te das cuenta, no importa cuántas veces lo hayas presenciado, que no siempre puedes manejar solo todo lo que has asumido. Pero te ayudaré a llevar a cabo esta carga”.