11 de abril
Nagato, Yamaguchi, Japón
¡Nace Teru Kaneko, conocida como Misuzu Kaneko (金子 みすゞ) !
Mujer escritora, considerada como una de las poetas infantiles más queridas de Japón.
Misuzu Kaneko fue criada por su madre y su abuela. La madre de Kaneko dirigía una librería y tenía un gran interés por la lectura y la educación. Si bien la mayoría de las niñas japonesas de ese período solo recibían educación hasta el sexto grado, Misuzu Kaneko continuó sus estudios hasta los diecisiete años, asistiendo a la escuela secundaria para niñas Ōtsu.
Las personas la describían como gentil, alegre y una excelente estudiante, así como una lectora voraz con una gran curiosidad por la naturaleza. En 1923, Kaneko se convirtió en gerente y única empleada de la pequeña librería de su tío. Allí descubrió revistas literarias infantiles que estaban en la cima del auge de la literatura infantil y que solicitaban cuentos y versos a sus lectores. Misuzu envió primero cinco poemas, entre ellos «Los peces», a cuatro revistas, y fue aceptado para su publicación en todas ellas. Pronto, sus poemas comenzaron a aparecer en revistas de todo el país y se convirtió en una celebridad literaria. Durante los siguientes cinco años publicó cincuenta y un versos más.
En 1926 Misuzu contrajo matrimonio arreglado por su tío, su hija, Fusae, nació en noviembre. Su nuevo esposo le fue infiel y contrajo una enfermedad venérea, que le pasó a Misuzu, causándole dolor físico de por vida. También la obligó a dejar de escribir. Finalmente se divorció de él en 1930, pero esto significó también perder la custodia de su hija a favor de su marido. La ley japonesa en ese momento otorgaba automáticamente al padre la custodia indiscutible del niño.
El 9 de marzo de 1930, el día antes de que su esposo tomara la custodia, Misuzu no tuvo otra opción que suicidarse en protesta. Después de bañar a Fusae y compartir un sakuramochi , Misuzu le escribió una carta a su esposo pidiéndole que dejara que su madre criara a la niña, y tomó una sobredosis de sedantes, muriendo al día siguiente, solo un mes antes de cumplir 27 años. Su hija finalmente fue criada por la abuela.
Algunos fragmentos:
“Amanecer,/ espléndido amanecer./ Gran captura,/ gran captura de sardinas.
Arriba en la playa/ hay una fiesta, / pero en el mar/ celebrarán funerales/ por decenas de miles.”
“No se lo diré a nadie: /Esta mañana, en el fondo del jardín,/ una flor derramó una lágrima.
Porque si corre el rumor/ y la abeja lo oye,
irá y le devolverá su néctar/ como si hubiera hecho mal.”
“Por más que extienda mis brazos,/ nunca podré volar por el cielo. / Y el pájaro que vuela no podrá correr/ rápido por la tierra, como yo.
Por más que me balancee/ no se producirá un bello sonido. / Y la campana que suena,/ no podrá saber tantas canciones como yo.
La campana, el pájaro y yo,/ todos diferentes, todos buenos.”