5 de diciembre
Londres, Inglaterra.
¡Nace Christina Rossetti!
Mujer escritora y poeta. Christina fue educada en su casa por sus padres, tenía tres hermanos. En la década posterior a 1840, la familia pasó por graves problemas económicos debido a la deteriorada salud mental y física del padre.
A los catorce años de edad, Christina sufrió una crisis nerviosa a la que le siguieron ataques de depresión. Durante este período, ella, su madre y su hermana estuvieron muy relacionadas con la iglesia anglicana; su vida religiosa tuvo una relevancia determinante en la vida personal de Christina. Christina comenzó a escribir a la edad de siete años, pero tenía ya treinta y un años cuando publicó su primera obra. El poema del título es su obra más conocida y, aunque a primera vista puede parecer simplemente una rima infantil sobre las travesuras de dos hermanas con unos duendes, tiene múltiples interpretaciones, es desafiante y complejo.Se ha interpretado este poema en diversas formas: viéndolo como una alegoría entre la tentación y la salvación o bien una obra sobre el deseo erótico y la redención social, entre otras.
Rossetti escribió y publicó durante el resto de su vida, aunque se dedicó principalmente a la escritura religiosa y a la poesía para niños. Mantuvo un gran círculo de amigos y durante diez años ayudó voluntariamente en una casa de acogida para prostitutas. Si bien tenía sentimientos encontrados en relación con el voto femenino, muchas estudiosas han identificado temas feministas en su poesía. Se opuso a la esclavitud en los Estados Unidos, la crueldad hacia los animales en la vivisección frecuente y la explotación de niñas en la prostitución de menores.
Christina permaneció por mucho tiempo sin ser tomada en cuenta ni leída hasta que en los años setenta estudiosas feministas comenzaron a recuperar su obra. En las últimas décadas su obra ha pasado a ocupar un lugar destacado dentro de la literatura victoriana.
Algunos fragmentos:
“Vale mucho más olvidar y sonreír, que recordar y entristecerse.”
“Si las escuchamos las flores nos hablan.”
Porque no hay amiga como una hermana /En clima tranquilo o tormentoso; /Para animar a una en el camino tedioso, /Para ir a buscar una si uno se extravía, /Para levantar una si una se tambalea, /Para fortalecer mientras una está de pie”.